Hablando en plata
Simplificación de textos usando Procesamiento del Lenguaje Natural
Ciertas actividades que se realizan en la sociedad requieren de un lenguaje preciso, que utiliza términos técnicos. En otras ocasiones, y por motivos históricos, han ido apareciendo dentro de dominios específicos del saber formas de comunicarse y de expresar las ideas que suponen una barrera de acceso para los no iniciados. Es el caso por ejemplo del lenguaje jurídico, el lenguaje administrativo o el del ámbito sanitario.
Esta situación se agrava en el caso de determinadas personas que tienen capacidades diferentes (bajo nivel formativo, con problemas de aprendizaje, los sordos, ciegos y sordociegos o las personas para las que el español no es su lengua materna) y que poco a poco se van viendo expulsadas de los espacios comunes de la actividad social. Los contenidos simplificados también nos benefician a todos ya que reducen el tiempo necesario para comprender los textos.
En el caso de la Administración, su actividad tiene un impacto muy grande sobre nuestras vidas y poco a poco parece que aumenta la conciencia de la importancia que tiene que su mensaje llegue a la ciudadanía. Este hecho se pone de manifiesto en iniciativas legislativas en todo el mundo, como el «ley para mejorar el acceso de los ciudadanos a la información y los servicios de la Administración, estableciendo que los documentos de la Administración dirigidos al público deben estar redactados con claridad, y para otros fines», en Estados Unidos e iniciativas en la misma dirección dentro de la Unión Europea («Cómo escribir con claridad», Directorate-General for Translation, European Commission). O, dentro de España, el « Manual de estilo de lenguaje claro: Criterios para la redacción de textos claros en internet »
El problema de la simplificación no es fácil de resolver, porque lo que es sencillo para unos puede no serlo para otros. Podemos hacer una aproximación a esta idea de lo que es « sencillo » en función de lo que nos permite hacer.
Así, un texto sería sencillo si cuando accedemos a él podemos:
- Encontrar lo que necesitamos
- Comprender lo que encontramos la primera vez que lo leemos o escuchamos.
- Utilizar lo que encontramos para satisfacer nuestras necesidades.
Al redactar se podrían utilizar distintas técnicas para conseguir esto, como:
- Organizar el contenido pensando en el lector
- Hablar de tú, para reducir la distancia con el autor
- Tratar de evitar en lo posible el uso de la voz pasiva
- Usar frases y párrafos cortos
- Emplear palabras comunes y corrientes
- Usar recursos de maquetación que hagan que la información sea fácil de seguir: cuadros de texto, listas, tablas, encabezados resaltados…
Pero ¿qué hacer con todo lo que se ha escrito ya?
Uno se pregunta si se podría simplificar texto de manera automática para hacer accesible la información que ya se ha generado.
¿En qué consistiría esta simplificación? Como explica Horacio Saggion en Automatic text simplification , «la simplificación automática de textos es el proceso de transformar un texto en otro que, transmitiendo idealmente el mismo mensaje, sea más fácil de leer y comprender por un público más amplio ».
La buena noticia es que sí, se puede simplificar texto usando tecnologías del lenguaje. No están resueltos todos los problemas y de hecho es un campo en desarrollo, con problemas abiertos, pero sí que se puede decir que las técnicas de procesamiento de lenguaje natural permiten hacer cosas como:
- Corrección gramatical: detectar y corregir errores gramaticales, como errores de concordancia, estructura de oraciones incorrecta o uso inadecuado de la puntuación. Esto ayuda a asegurar que el texto sea coherente y comprensible.
- Simplificación del lenguaje: analizar y reescribir oraciones o párrafos complejos en un lenguaje más claro y accesible. Puede identificar estructuras complicadas o terminología técnica y sugerir formas más simples de expresar la información.
- Mejora de la coherencia: ayuda a mejorar la coherencia del texto al analizar la relación entre oraciones y párrafos. Pueden detectar incoherencias lógicas, repeticiones innecesarias o falta de transiciones suaves entre ideas. Esto contribuye a una mayor comprensión y fluidez en el texto.
- Resumen y síntesis: resumir o sintetizar grandes cantidades de texto en una forma más concisa y clara. Esto es útil para proporcionar una visión general de un tema o para presentar información de manera más digerible y fácil de entender.
- Detección y sugerencia de vocabulario adecuado: Los sistemas de PLN pueden identificar palabras o términos que pueden resultar complicados o poco familiares para los lectores y sugerir alternativas más claras o ampliamente entendidas. Esto ayuda a mejorar la comprensión del texto.
Queda mucho por investigar y por resolver. En LHF Labs pensamos que existe una gran oportunidad para hacer más accesible la comunicación entre la Administración y la ciudadanía, lo que redundaría en un beneficio para todos y reduciría la exclusión social de las personas que tienen problemas para relacionarse con las instituciones o entender cómo les afecta lo público, reduciría la desafección del ciudadano hacia su Administración y ayudaría, entre otras cosas, a mitigar errores en procedimientos administrativos.
¿Tú qué opinas? ¿Te gustaría contar con un traductor Administración – humano?